CARTA ABIERTA A ZAPATERO: POR DIENCÉFALO

No os perdáis esta magnífica entrada de nuestro compañero DIENCÉFALO, en forma de carta dirigida a Zapatero.

Excelentísimo presidente del reino de España. Camarada. Dos puntos. Me impele a escribirle esta misiva, su reacción rusa ante la propuesta del señor Ibarretxe en el parlamento vasco. Usted afirmó que el lehendakari tendría que escucharle. Y aquí empieza mi desasosiego. ¿El qué ha de escucharle? ¿Le dirá usted que aquello que discutió con ETA a través de sus chicos del partido socialista de euskadi, incluso antes del 14M del 2004, no puede negociarlo con el representante legítimo de la comunidad autónoma vasca? Tendrá que decirle que el diálogo y demás propuestas políticas que llevó a cabo con Ternera, no está dispuesto a sostenerlo con él porque nada tiene que ofrecerle a cambio. Qué más ha de escucharle. Por ejemplo, aquello de que los vascos serán lo que quieran ser. Quizá desee usted explicarle cuál es su discutible concepto de nación. O le dirá lo del talante. Probablemente usted se permita el lujo de explicarle que para una decisión así es necesario el consenso transversal, por ejemplo el conseguido en el pacto del Tinell: Una unión de todos contra uno donde lo importante es lo que se aísla y marca como a las reses, no lo que une. ¿De eso le hablará? Mire, muchos consideran que Ibarretxe es un poco monotemático y algo visionario. No lo sé, lo que sí le puedo asegurar es que es un empecinado que no reculará ante su hipnótica conversación. Y es suficientemente listo para haber sobrevivido a diferentes crisis, al tiempo que se ha cargado al “inteligente” oficial del PNV, el señor Imaz. Tenga cuidado, porque sus juegos malabares con Ibarretxe a lo peor no sirven. El se ha cansado de coger nueces del suelo y tiene pensado mover el árbol. ¿Qué le dirá, que es un hombre de otro siglo? Y eso usted, que se encuentra encallado en la revisión de memoria histórica del siglo pasado, con sus buenos y malos, con sus justicias anacrónicas. Quizá también le comente que usted puede pactar con radicales independentistas como el bloque gallego, ezquerra balística de cataluña, o con cualquier grupo que se ponga unas siglas en la frente cuando de Baleares se refiere. Pero con Ibarretxe, ni hablar. Usted dígaselo a ver qué cara pone. También le explicará que se ha cargado la solidaridad entre diferentes territorios por motivos de ignominioso cálculo político, primando y castigando con el presupuesto según convenga. Le hablará de Constitución cuando algunos de sus alcaldes se la pasan por el telar de la bandera. Hablará y hablará, usted tan amigo de gritar que aprobaría en el parlamento español lo que salga de Cataluña. Pero no dice lo mismo cuando se trata del país vasco. Da igual, porque tampoco cumple. Le explicará que cuando el Estatut había embarrancado, usted en una noche de orgía monclovita lo sacó adelante a pesar de que era inconstitucional de raíz. Le dirá al lehendakari que parará su proyecto con la Justicia, a la misma que tiene adormilada para que no se pronuncie sobre la inconstitucionalidad del Estatut antes de las elecciones. Qué más. Podría estar horas imaginando todo lo que tiene que escucharle. Pero ya vale. El problema es que Ibarretxe sospecha, que lo que a usted le jode, es que el plan no lleva el nombre de Zapatero. Si fuera así, ya se encargaría de venderlo como una forma de integrar a los nacionalistas para que se sientan cómodos. A usted no le gusta que le saquen de la foto. Si el plan fuera suyo, la iniciativa suya, sería otra cosa, estaría dando saltitos por los jardines de Moncloa. Pero la cuestión fundamental, por si lo dicho hasta ahora fuera poco, es que usted a partir del momento en que Zerolo se casó, ya no tiene nada que ofrecer en esta legislatura.

Me despido con todo el respeto y admiración que se merece.

Fdo: Un ciudadano que sí le escucha.